viernes, 29 de julio de 2016

El ajolote en la mitología azteca

Su nombre proviene del vocablo náhuatl ‘axolotl’: ‘tal’-agua y ‘xolotl’- monstruo; que significa ‘monstruo acuático’.

“En la mitología náhuatl, el ajolote corresponde a la advocación acuática del dios Xólotl, hermano mellizo del dios Quetzalcóatl, monstruoso a causa del nacimiento gemelar.
Xolotl se encuentra asociado a la idea del movimiento y de la vida, de acuerdo con la leyenda del quinto sol. La dualidad se manifiesta en las transformaciones a las que recurre para evitar el sacrificio.
En la ‘Historia general de las cosas de la Nueva España’ Bernardino de Sahagún cuenta que Xolotl se negó a sacrificarse en el fuego para hacer que el Sol y la Luna giraran y aparecieran el día y la noche. 
Xolotl rehusaba la muerte, huyendo cuando vio llegar al verdugo y, ocultándose en las milpas, se convirtió en una planta de maíz de dos cañas o ajolote (xolotl); al ser descubierto echó a correr otra vez y se escondió en un magueyal, donde tomó la forma de una penca doble o mejolote (metl-maguey y xolotl).
Una vez más lo halló el verdugo y escapó de nuevo introduciéndose al agua, donde se transformó en un pez llamado axolotl. Ésta es su última metamorfosis. Finalmente, el verdugo lo atrapó y le dio muerte. Xolotl es un dios que le tiene miedo a la muerte, que no la acepta y quiere escapar de ella mediante sus poderes de transformación.”

No hay comentarios.:

Publicar un comentario